lunes, 11 de abril de 2016

Fuiste mía

ya cayó la noche, llega con ella la esperanza
y con la esperanza llegas tu, más linda que la ves pasada
te veo tan hermosa y hoy tu presencia no es escasa
al parecer hay tiempo y eso no siempre pasa…
Pienso en como repartir el tiempo
puedo pasarlo viéndote,
deseando que seas mía
pidiendo al universo, que me deje probar de ti
para saciar esa curiosidad mía
podría pasar riendo, toda la noche, y también todo el día
pues contigo es diferente, y puedo hacerlo sin mentiras
y hablar sin sentido, y darle sentido a la vida
y compartir nuestras experiencias,
nuestros sueños y nuestra vida
pero esa idea tampoco es de mi completo agrado,
quiero escucharte todo lo que me digas
y perder el tiempo y perderme en tu voz
y aunque hoy hay algo diferente, y te siento muy relajada,
con cada una de las palabras que me dices
mi mente comienza a pensar…a dudar,
y por supuesto a esperar a saber tus reacciones
tus sentimientos, y tus amores.
veo tus ojos, y me pierdo en ellos,
te escucho hablar, y no pongo atención en la historia,
solo escucho la melodía de tu voz, y busco quedarme acostado
junto a ti en el sofá de la sala, mientras trabajas,
mientras me platicas y me deleitas con tu voz.

no hay nada que me guste más que escucharte,
como si se tratara de la oportunidad de mi vida,
como si fuera un concurso para poder amarte
como si fuera el requisito único para desearte
y después de una larga platica,
unos recuerdos locos,
el poema nocturno de acuña,
y muchas risas con maña

nos vemos a los ojos, y nos entran las ganas
ganas de abrazarnos como si nos hiciéramos falta
ganas de tocarnos todo, ganas de llegar al alma.
bien dicen que el amor es locura,
que la locura no es para los cuerdos,
que la inteligencia tiene algo de locura
y que la locura causa estragos…
y valla que lo hace, y valla que lo hizo
nunca una noche de plática
me había parecido un espejismo
te pido una oportunidad, quiero darte un beso,
pero pido permiso, por caballero, y solo porque mereces eso y mas.
te beso en la mejilla, y me dan ganas de llorar,
pues aún con un beso en la mejilla,
por dentro me has transportado hasta el mar.
cada beso me acerca poco a poco a tu boca,
primero por el cuello, sin quitarte la ropa
y  mientras mis labios buscan tu boca,
explota el deseo,
y tus manos traviesas entran en el juego,
deciden ir a dar un paseo,
deciden arrojar un poco más de leña al fuego…
y después de unos abrazos,mordidas  y besos
te recuesto en el sofá
y me acomodo en tu regazo,
y en ves de calmar mis besos
te busco mucho más…
soñaba ya hace tiempo contigo,
con que un momento así llegaría,
pensaba en el disfrute de mi cuerpo con el tuyo
y no dudaba que pasaría.
que me permitieras tocar tu cuerpo
y matar la curiosidad,
me permitiera ser tu hombre
y yo ser para ti muchas cosas más
y la curiosidad no solo me afectó a mi,
nos afectó a ambos,
que después de tanto arder en el sofá
no hubo más que buscar el cuarto
tenía miedo de no saber el secreto que escondía tu ombligo
temía que no supieras lo que sentías por mi,
pero es que la obscuridad me permitió verte completa
la obscuridad pudo hacer que  fueras para mí…
no sabes lo hermoso que se siente
que me digas lo que quieres,
poder tocar tu cuerpo
y disfrutar de sus placeres
pero es que la curiosidad mató al gato
yo digo que el gato no murió,
solo recordará lo que hizo por sus 7 vidas
y no es que a este poema la hagan falta gatos
simplemente faltó perversión para el acto
faltó quitar la pena,y en general disfrutar del pacto.
pero desnudarte sin malicia,
y tocarte sin temor,
porque si tu quieres y yo quiero
y no hay porqué negar el amor.
y que esta noche se guarde en mi memoria
y que de esta noche no tengamos rencor
porque esta noche fuiste mía
como fuere, como sea, con amor.

Gonzalo santiago martinez.  11/04/16 2:30am /s